A través de los trabajos que realicemos como estudiantes demostraremos nuestro involucramiento con el proceso de enseñanza-aprendizaje en el curso. Ello debe plasmarse en los resultados de aprendizaje que se verificarán a través de las evidencias en los distintos momentos.
LA CONSIGNA:
La tarea final para el curso consiste en el diseño del Sistema de Evaluación de la asignatura que hemos elegido acorde con el plan de estudio rediseñado (curso de Diseño y Desarrollo Curricular por Competencias). Considero importante destacar que esta forma de articular los cursos facilita la ruta a un aprendizaje significativo. La tarea final estará comprendida por el desarrollo de los siguientes productos:
- Enfoques de Evaluación: argumento respecto a la aplicación de la evaluación formativa en la asignatura elegida.
- Plan de Evaluación: Debe estar constituída por las unidades de aprendizaje, resultados de aprendizaje, indicadores, evidencias, e instrumentos de evaluación.
- Tarea Auténtica: Está comprendida por productos intermedios que son retroalimentados por el docente a cargo del curso y luego reajustados o mejorados por el estudiante con la idea de llegar a un producto final aceptable.
- Instrumentos de Evaluación: Son instrumentos que valoran el avance o desarrollo de los aprendizajes previstos en el sílabo de la asignatura a través de la retroalimentación del docente experto.
- Retroalimentación: Consiste en la valoración que se realiza a un producto o desempeño en función a los aprendizajes programados para un curso/asignatura/unidad de aprendizaje específico. La retroalimentación puede ser formal o informal, directa o indirecta, ya sea del docente al estudiante, entre estudiantes, etc. La Pirámide de Wilson representa una herramienta importante para organizar nuestra retroalimentación como docentes.
- La evaluación del perfil de egreso y
- La evaluación de la asignatura
Antes de diseñar el sistema de evaluación de mi asignatura, veo que es necesario revisar y ahondar en algunos conceptos, definiciones y terminología que han ido emergiendo en los últimos años como fruto de las investigaciones en diseño y planificación curricular y evaluación. La revisión de fuentes y referentes es primordial en esta etapa. Para ello, la lectura es una actividad básica a la que deberíamos someternos regularmente como docentes universitarios. Considero que es un deber si pensamos ejercer la docencia universitaria. Así nos mantenemos actualizados y ello redundaría en nuestros estudiantes.
El planteamiento de algunas preguntas previas ayudará a focalizar nuestra la lectura con mayor precisión. Para empezar es de gran beneficio interrogarse: ¿porqué leemos los docentes? Leemos por muchas razones, porque no conocemos del tema; porque nos interesa profundizar sobre algo que conocemos a través de terceros o lo sabemos solo de manera superficial; porque tenemos curiosidad de lo que dicen otros autores, porque queremos contrastar teorías, enfoques, modelos, metodologías, estrategias; porque debemos dar solución a un problema, porque algo novedoso circunda en el contexto académico y nos interesa saber qué es, cómo es y para qué sirve; porque nos interesa estar actualizados y preparados para nuestros estudiantes. En fin, razones múltiples que hacen de la lectura una herramienta primordial.
La búsqueda de información puede tomar tiempo, cómo no, pero veamos esta tarea con positivismo y pensemos en que estamos invirtiendo tiempo en algo que aportará a nuestro desarrollo profesional docente y que ello se revertirá en la formación de nuestros estudiantes.
Pasemos al planteamiento de las preguntas previas a la lectura: ¿En qué consiste la evaluación en un currículo basado en competencias? y ¿Cuáles son las tendencias, enfoques y concepciones de evaluación en este modelo de currículo?
LAS ALTERNATIVAS DEL ENFOQUE DE EVALUACIÓN FORMATIVA
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